Las primarias, votación de mentira.
¿Creemos realmente en estas primarias?
Que conveniente resulta para el duopolio contar con propaganda gratuita, varios meses antes, que el resto de los candidatos. Es irrisorio pensar que no tienen ya elegido al candidato que en realidad va a ir en las elecciones, los tres restantes en la concertación están haciendo un saludo a la bandera.
Pero ya existen varios llamados a boicotear estas primarias, votando por Gómez, o los que tengan estómago para votar por un DC lo pueden hacer por Orrego, ahora si alguno es más de derecha podría votar por Velasco.
¿Pero acaso sería la primera vez que hacen una primaria trucha?
¿No hicieron lo mismo con Frei?
Demás está decir que a los candidatos que están fuera del duopolio les faltó viveza, para hacer unas primarias entre ellos, tendrían un pequeño espacio al menos para mostrarse. Pero quizás el egoísmo de unos, la ambición de otros, y el no poner el bien común por sobre el bien de sus seguidores es lo que no los deja ponerse de acuerdo.
Los debates.
Meras entrevistas, es bastante ridículo pensar que en un debate no hay discusión, nuevamente la injusticia del sistema se nos impone, no hay ninguna equidad al momento de invitar a los candidatos, sean del partido que sean, a programas televisivos por ejemplo, y más encima tenemos que escuchar mentira tras mentira, ambas alianzas políticas ya gobernaron y ahora prometen todo lo que no hicieron, ahora prometen todo a lo que se han opuesto por años, claro, después nos dicen que la cámara tuvo la culpa, como si los políticos de las cámaras fueran extraterrestes y no de sus mismos partidos, como si no se pusieran de acuerdo antes de votar una u otra ley, como si no existiera el lobby y no supiéramos que cada ley tiene un precio diferente.
Por Dios que se echan de menos los políticos con consecuencia como fue Salvador Allende, “Pagaré con mi vida la lealtad del pueblo” y así fue, la dignidad de no entregarse al traidor fascista, de no estar preso, de no salir al exilio, él habría sido recibido como un rey en el extranjero, sin embargo pagó con su vida su consecuencia, su lealtad, su dignidad, su valentía.
Un Presidente que verdaderamente gobernó para su pueblo, tal cual lo prometió. ¿Cuántos ahora han hecho promesas que jamás se han cumplido? ¿Cuántos se dejan manipular por el poder del empresariado al momento de hacer o dejar de hacer algo para el pueblo?
El convidado de piedra
La falta de dignidad me abruma, es lo que ocurre con el Partido Comunista, el convidado de piedra, por años ha tratado de ser aceptado por la concertación, claro, es la única forma de estar en el centro político, pero ¿vale la pena traicionar a sus militantes a cambio?
Un partido que históricamente fue la voz de las masas, una vanguardia en las movilizaciones sociales, un defensor de los desvalidos, de los aplastados, de los golpeados, hoy es un corderito defendiendo un sistema que a todas luces es la injusticia misma.
Sin duda la mayoría de sus militantes están muy lejos de pensar como su cúpula, la que se ha alejado tremendamente de su gente, llamando a sus militantes a “mantener la compostura” por decirlo sutilmente, como en la última marcha de los estudiantes donde los militantes de la juventud fueron llamados a retirarse en cuanto empezaran los disturbios.
Como el cambio radical de postura de Camila Vallejos, que no votaría por Bachelet primero y que después era la mejor opción. ¿Es este el mismo partido que alguna vez gritaba con el alma el Patria o muerte, venceremos?
Sin duda que no. ¿Pero es tan raro lo que han hecho en verdad?
Este partido que durante la Dictadura levantó las banderas de la lucha incluso armada, siempre junto y con el pueblo, finalmente fue dejado de lado al momento de recuperar la “democracia”, una traición más de esta concertación, que se tomó la libertad de negociar la justicia, la verdad, la impunidad, al dejar no sólo libre y sin juicio al cobarde dictador, sino con el cargo de senador vitalicio, a mi juicio algo imperdonable.
Con ellos es con los que el PC hoy está negociando.
Francamente espero que los militantes consecuentes, comprometidos, dignos, no sólo le den una lección a la concertación, sino también a sus dirigentes, votando en estas primarias por alguien que no sea Bachelet.
Especial para SICNoticias.cl por Cecilia Ibáñez.-