A propósito del debate con una parte de los candidatos del distrito 13, Valparaíso, isla de Pascua y Juan Fernández, emitido por la cadena transnacional CNN Chile el 29 de agosto de 2013 a las 23:30 horas, y en virtud de los ataques e insultos que he recibido por negarme a aceptar, en silencio la exclusión, injustificada y antidemocrática de 3 de los postulantes en el mismo distrito, hago las siguientes precisiones.
Mi reacción ha sido de indignación e incredulidad, es mi forma de solidarizar con estos jóvenes que, algunos a regañadientes, se han introducido en la institucionalidad para disputar un espacio para los cambios auténticos, lo ocurrido es una pequeña muestra de lo que les ocurrirá al enfrentarse a los poderes transversales, que se niegan a perder la más mínima cuota de poder que arriesgue su buen pasar, y prefieren seguir con la soberanía popular secuestrada.
Por cierto CNN Chile tiene una gran responsabilidad en lo ocurrido, pero es sabido el sesgo de los grandes medios para tratar la información, sobre todo si escapa al control de duopolio que se ha repartido el poder y las comunicaciones durante décadas, de ellos no es mucho lo que se puede esperar.
De los candidatos de la derecha no hay posibilidades que aboguen por la libertad de expresión y la no discriminación. Cornejo, bueno el es del PDC…pero de Jorge Coulon, víctima de la persecución, el exilio y las atrocidades de la dictadura, un artista respetado y símbolo de la democracia y la libertad, parte de un partido que fue antes perseguido y después excluido del banquete “democrático” colectividad que se la ha jugado por estar sentada en mesas como la del debate de marras, resulta increíble que lo haya aceptado.
Es cierto que lo representó, pero se convendrá conmigo que lo correcto, lo democrático, lo esperable habría sido no sólo pedirlo, sino que exigirlo a riesgo de no participar del debate, eso de seguro le habría dado más visibilidad, si es que de eso se trataba, que hacerse parte de la trampa que montó la estación televisiva transnacional.
En el minuto 22 de transcurrido el programa, Coulon, de pronto, tibiamente, señaló la ausencia de los otros candidatos, el mismo se contestó diciendo que ya lo habían conversado, fuera de cámara, con el conductor del programa, aqui está el link al video del programa, usted saque sus propias conclusiones [youtube id=”9hZLpGx8ijo#t” width=”600″ height=”350″]
De figuras como Jorge Coulon, se espera más, mucho más, de haber actuado en consecuencia con lo que representa, de seguro hoy estaría siendo felicitado y su carácter de demócrata habría salido fortalecido, es una pena que no haya sido así.
La contradicción no fue participar o no del debate, como me espetan algunos, sino que de aceptar o no aceptar la exclusión de 3 candidatos, que en igualdad de condiciones compiten por un escaño en el parlamento.
No hay ninguna justificación para que los demás candidatos no hayan sido convocados al debate, no existe justificación para quienes dicen representar principios democráticos lo hayan aceptado.
En la víspera del mentado debate, la vocera del comando de la Nueva Mayoría, en el mismo canal, interpelada, por los periodistas de turno, acerca del emplazamiento de Matthei para debatir con Bachelet, respondió: Estamos disponibles para debatir, pero no entre dos, lo justo, lo democrático es que el debate, todos lo que sean, sea con la participación de los 9 candidatos. ¿Ese criterio no corre para las parlamentarias?
Un par de horas después, con incredulidad, pudimos observar absolutamente lo contrario, con la única explicación, dada por Coulon, no por el canal en forma oficial, que existiría un compromiso para invitar posteriormente a los candidatos excluidos. Aunque así fuera, eso no explica la razón para evitar la participación en igualdad de condiciones, de todos los postulantes, en un mismo debate, no explica ni justifica la exclusión.
Acaso Daniela López, José Otárola y Sebastián Farfán, que han cumplido los mismos requisitos impuestos por la legislación para inscribir sus candidaturas, son de otra categoría que no pueden sentarse a la misma mesa a debatir con los representantes de la Derecha y la Nueva Mayoría, cual fue el factor discriminador para que estuviera Barrientos y no Otárola, para que estuviera Cornejo y no Farfán. Porqué Godoy y no Daniela López.
Quién establece que el debate deba hacerse parcelado, los unos aquí y los otros allá.
La única y pura explicación es el ejercicio desembozado de la arbitrariedad y lo contrario a la democracia que se dice aspirar, ejercicio que con o sin querer Jorge Coulon fue parte.
Lo ocurrido en el debate de CNN Chile, no contribuye a la profundización de la democracia ni aporta al fin de la malas prácticas que tienen al quehacer político por el suelo, es más, le da sustento a quienes desconfían de las promesas de campaña de aquellos que parecen no percibir el cansancio e indignación que cruza a vastos sectores de nuestro país.
No tengo dudas de las buenas intenciones de Coulon, pero de buenas intenciones está pavimentado el camino al infierno y es de lamentar que se haya prestado, por acción u omisión, para contribuir a los esfuerzos que se hacen, desde el poder, para minimizar, invisibilizar y no informar, con equidad, de aquellas alternativas que cuestionan el sistema de manera radical.
Lo ocurrido el 29 de agosto, a través de CNN Chile, sienta un precedente nefasto, y no es la verificación del rol parcial y obsecuente de la prensa y los medios empresariales que ya es conocido, si no que, quedó demostrado, que hay candidatos, que representan principios democráticos, dispuestos a aceptar conductas discriminatorias y excluyentes.
Lo irónico es que, tan sólo hace unos años, lo más probable es que el Sr. Coulon y sus adherentes que hoy me insultan y descalifican, estaría suscribiendo unos planteamientos como estos.
Sin embargo, por obra de los tiempos que cambian, que nos cambian, las reacciones han sido como las siguientes:
Edgar Guíñez M.
Comunicador Autodidacta
Director
SICNoticias.cl
